¿Por qué no hay robots en Dune?: el lore del mundo creado por Frank Herbert

La historia de Dune transcurre en un futuro muy lejano. Es una galaxia feudal gobernada por un emperador pero en la cual hay diferentes Casas e instituciones como los Bene Gesserit, los Mentats o la Cofradía espacial. Es un mundo en donde hay tecnología avanzada, pero en la cual no existe ningún tipo de androide o inteligencia artificial. ¿Por qué? ¿Cómo se llegó a aquel distante tiempo tan diferente a la actualidad? ¿Por qué la trama de la novela y sus tantas adaptaciones se sitúa en el planeta Arrakis y no en otro lugar? Para contar esta historia, Frank Herbert debió construir un mundo coherente y por lo tanto con un pasado histórico en el que apoyarse. O lo que también se llama comúnmente: lore.

La cruzada contra las máquinas

Para entender de manera integral el contexto de esta obra habría que remontarse miles de años antes de que ocurriera. Durante un largo período de tiempo —cerca de 10000 años— la humanidad se expandió desde la Vieja Tierra hasta todo el universo conocido. Esto se hizo de una forma caótica y desenfrenada, guíada por una nueva reinterpretación de la Biblia, la cual decía: “Crezcan y multiplíquense, llenen el universo, sométanlo y reinen sobre todas las especies de bestias extrañas y criaturas vivientes en el espacio infinito, las tierras infinitas y debajo de ellas”. Sin embargo, esta expansión llegó a un punto crítico.

En ese momento había una galaxia poblada tanto de humanos como de androides, hechos a su semejanza. Pero estos crecieron en poder, superando a la humanidad. De allí surgió la llamada Jihad Butleriana, una Cruzada que erradicó la totalidad de las máquinas. De las cenizas de la Guerra la galaxia debió ser reconfigurada. Se dio forma a un tipo de organización que suplantará el poder y la dependencia previa a lo artificial y la reemplazaría por lo netamente humano. Este periodo de transición no estaría exento de sus conflictos: “Fueron tiempos de profundas paradojas”, se diría tiempo después.

Para que una Jihad no sucediera de nuevo, se impuso un nuevo concepto: “No construirás una máquina a semejanza de la mente humana”. Y como parte de un intento de unificar a la humanidad tras el desastre se dedujo la existencia de un mandato común a todas las religiones: “No desfigurarás el alma”. Ese fue el puntapié para la organización de una Comisión de Traductores Ecuménicos, los cuales se reunieron en una una isla neutral de la Vieja Tierra “con la común convicción de la existencia de una Esencia Divina en el universo”. Así, se vieron representados cada religión que contuviera al menos 1 millón de seguidores.

Sin embargo, los debates se extendieron por años, y se fue generando una muy mala imagen de la comisión en sus comienzos. Hubo estallidos de violencia en contra de los Traductores Ecuménicos, hasta el punto de que los conflictos llegaron a cobrar la vida de cerca de ochenta millones de personas. Si bien años más tarde se llegó a constituir la Biblia Católica Naranja, el texto que unificaría a todas las religiones, lo que mantuvo en pie a la galaxia en este tiempo fueron principalmente tres entidades: la Cofradía, la Bene Gesserit y el Landsraad.

Las tres grandes fuerzas de la galaxia

La primera se había transformado con el tiempo en un monopolio del viaje espacial. Antes de su creación, las travesías interplanetarias eran lentas, inseguras e irregulares. La Cofradía logró revertir esta situación y cumplió un rol clave en el periodo luego de la Jihad al ofrecer transporte gratuito para todos los asuntos políticos. Ya hacía dos mil años que existía y su papel era de tal importancia que el Calendario Imperial toma como punto de partida su fundación. Las grandes naves en forma cilíndrica que aparecen en Dune Parte 1 y que transportan a los Atreides a Arrakis son de su propiedad.

El segundo elemento del tríptico sobre el cual se sostenía el equilibrio universal era el de la Bene Gesserit. Esta se conformó como una orden de mujeres dedicadas a un único objetivo: dar a luz al Kwisatz Haderash, un ser humano perfecto que cruzaría las fronteras del espacio y tiempo y que daría guía y estabilidad a la galaxia, o como ellos lo llamaban “El camino más corto” o “Aquel que puede estar en muchos lugares a la vez”. Este grupo está entrenado de tal forma que explota al máximo su capacidad, al tener diversos poderes prescientes y la Voz, usada para controlar a otras mentes. Lady Jessica, la esposa del Duque Leto Atreides o su superior, La Reverenda Madre Gaius Helen Mohiam, son las principales Bene Gesserit que aparecen en las narrativas del libro y sus adaptaciones.

Y la última pata esencial para la estabilidad galáctica se encontraría en la Liga del Landsraad, un conjunto de Casas feudales que se hallarían bajo el reinado de un Emperador. La Casa Corrino, la Casa Atreides o la Casa Harkonnen son las más conocidas durante los eventos de Dune. Y el Emperador Padishah Shaddam IV es quien gobierna la galaxia en este tiempo.

Estas tres entidades se hallarían dentro de una tregua universal llamada la Gran Convención, la cual prohibiría el uso de armas atómicas contra seres humanos.

Otras importantes organizaciones conformadas fueron la institución de los Mentats, personas entrenadas como computadoras, de conocimiento amplio y cálculo veloz y la CHOAM, (Combine Honnete Ober Advancer Mercantiles), encargada de las finanzas de la galaxia.

La especia que lo sostiene todo

Sin embargo, en esta nueva estructura nacida de la Jihad nada sería posible sin la especia melange, cosechada bajo las dunas de Arrakis. De ella dependen los navegantes de la Cofradía, quienes pueden realizar los viajes interespaciales gracias a la mutación generada por la especia; de ella depende el poderío económico de las Casas que tengan mayor cantidad de este recurso; de ella depende la presciencia de la Bene Gesserit, necesaria para sus propios objetivos.

Por ello, Arrakis, también llamada Dune, es el centro de este relato. Un planeta desértico pero vital, al cual llega la Casa Atreides, y su príncipe, Paul, bajo órdenes imperiales. Pronto se ven envueltos en una intriga política, la cual desemboca en una historia que explora los peligros del mesianismo, la importancia de la ecología y la lucha por los recursos naturales, todo enmarcado en una narrativa enigmática y atrapante.

Glosario con algunas de las palabras que componen el mundo creado por Frank Herbert:

Arrakis: el planeta conocido como Dune. Tercer planeta de Canopus.

Bene Gesserit: antigua escuela de adiestramiento mental y físico establecida en un principio para estudiantes femeninas después de que la Yihad Butleriana destruyera las llamadas «máquinas pensantes» y los robots.

Biblia católica naranja: el Libro de las Acumulaciones, texto producido por la Comisión de Traductores Ecuménicos. Contiene elementos de religiones muy antiguas, incluidas el Maometh Saari, la Cristiandad Mahayana, el Catolicismo Zensunni y las tradiciones Budislámicas. Su supremo mandamiento es «No desfigurarás el alma».

CHOAM: siglas de Combine Honnete Ober Advancer Mercantiles: la corporación universal para el desarrollo comercial, controlada por el emperador y las Grandes Casas, con la Cofradía y la Bene Gesserit como socios sin derecho a voto.

Cofradía: la Cofradía Espacial, una de las columnas del trípode político sobre la que se mantiene la Gran Convención. La Cofradía fue la segunda escuela de adiestramiento físico-mental tras la Yihad Butleriana. El inicio del monopolio de la Cofradía sobre los viajes espaciales, los transportes y todas las operaciones bancarias interplanetarias se usa como punto de partida del calendario imperial.

Destriltraje: traje inventado en Arrakis que cubre todo el cuerpo. Su tejido está compuesto por varias capas microsandwich que disipan el calor del cuerpo y filtran los residuos orgánicos. La humedad recuperada puede sorberse a través de un tubo de los bolsillos de recuperación donde se almacena.

Fremen: tribus libres de Arrakis, habitantes del desierto, últimos descendientes de los Nómadas Zensunni. («Piratas de la Arena», de acuerdo con el Diccionario Imperial).

Galach: lengua oficial del Imperio. Angloeslavo híbrido con fuertes reminiscencias de términos culturalmente especializados adoptados en el transcurso de la larga cadena de migraciones humanas.

Gran Convención: tregua universal impuesta por el equilibrio de poderes entre la Cofradía, las Grandes Casas y el Imperio. Su principal regla prohíbe el uso de armas atómicas contra objetivos humanos. Cada regla de la Gran Convención se inicia con: «Serán obedecidas las formas…».

Jihad Butleriana: la cruzada contra los ordenadores, máquinas pensantes y robots conscientes iniciada en el año 201 B. G. y terminada en el 108 B. G. Su principal mandamiento ha quedado registrado en la Biblia Católica Naranja como «No construirás una máquina a semejanza de la mente humana».

Kwisatz Haderach: «El camino más corto». Esta es la etiqueta aplicada por la Bene Gesserit a lo desconocido y que intentó alcanzar a través de la solución genética: un macho Bene Gesserit cuyos poderes orgánicos mentales pudieran hacer de puente en el espacio y el tiempo.

Melange: la «especia de especias», cultivo del que Arrakis es la única fuente. La especia, notable principalmente por sus cualidades geriátricas, es medianamente adictiva si se toma en pequeñas dosis, pero provoca una poderosa adicción si se toma en cantidad superior a dos gramos diarios por cada setenta kilos de peso corporal. Muad’Dib definió la especia como la clave de sus poderes proféticos. Los navegantes de la Cofradía proclaman lo mismo. Su precio en el mercado imperial llega a alcanzar los seiscientos veinte mil solaris el decagramo.

Muad’Dib: ratón canguro adaptado a Arrakis, una criatura asociada en la mitología terrena-espiritual de los Fremen cuya silueta es visible en la superficie de la segunda luna del planeta. Los Fremen la admiran por su habilidad para sobrevivir en el desierto.

Ornitóptero (comúnmente: tóptero): cualquier vehículo aéreo capaz de sustentarse en el aire batiendo las alas como si fuera un pájaro.

Sardaukar: soldados fanáticos del emperador Padishah. Eran hombres provenientes de un medio ambiente tan duro que seis de cada trece personas morían antes de la edad de diez años. Su adiestramiento militar enfatizaba la brutalidad y un desprecio casi suicida por la seguridad personal. Desde la infancia se les enseñaba a usar la crueldad como un arma cualquiera, a fin de debilitar a los oponentes mediante el terror. Cuando se encontraban en el punto álgido de influencia en la política del universo, se decía que su habilidad era equiparable a la del Ginaz de décimo grado y que su astucia en el combate equivalía a la de una adepta Bene Gesserit. Se rumoreaba que cualquiera de ellos podía enfrentarse con diez mercenarios militares ordinarios del Landsraad. En tiempos de Shaddam IV, cuando aún eran formidables, su fuerza se vio gradualmente mermada por una excesiva confianza en sí mismos y el misticismo que sostenía su religión guerrera quedó profundamente marcado por el cinismo.

Shai-Hulud: gusano de arena de Arrakis, el «Viejo del Desierto», el «Viejo Padre Eternidad» y «Abuelo del Desierto». Cabe destacar que este nombre, dicho en un cierto tono o escrito con mayúscula, designa la deidad terrestre de las supersticiones familiares Fremen. Los gusanos de arena alcanzan tamaños enormes (se han registrado en el desierto profundo especímenes de cuatrocientos metros de longitud) y viven mucho tiempo, a menos que los maten sus semejantes o terminen ahogados en agua, que es venenosa para ellos. Probablemente, la mayor parte de la arena existente en Arrakis es resultado de la acción de los gusanos de arena.

Voz: adiestramiento combinado concebido por la Bene Gesserit que permite a un adepto controlar a otras personas seleccionando tan solo el tono e intensidad de su voz.

Zensunni: seguidores de una secta cismática que se separó de las enseñanzas de Maometh (el autollamado «Tercer Muhammed») sobre el 1381 B. G. La religión Zensunni se conoce principalmente por su énfasis en lo místico y por su retorno a «los caminos de los padres». Muchos estudios señalan a Ali Ben Ohashi como jefe del cisma original, pero hay pruebas de que Ohashi solo fue el portavoz masculino de su segunda mujer, Nisai.

Mapa de Arrakis:

Nota por Alex Dan Leibovich | Periodista | Redactor en Clarín, Indie Hoy, Peliplat y Erramundos.

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