Los espíritus de la isla: donde los débiles mueren y los sabios se van

Con su música distintiva, diálogos ingeniosos y cinematografía que capta las sutilezas de las emociones de los personajes, Los espíritus de la isla pinta un retrato de conexiones humanas invisibles y lo absurdo de la vida.

A pesar de haber ganado numerosos premios de guion, como el segundo premio al Mejor Guion en el Festival Internacional de Cine de Venecia, el talento de Martin McDonagh excede la escritura del guion. Él elabora su narrativa a través de medios visuales y auditivos, lo que lo convierte en un maestro del teatro, el cine y el guion. En un momento en el que se subestima la escritura de guiones, es revelador ver una historia como esta.

Inisherin, de tierras baldías y clima frío, se convierte en el escenario único para el desenlace de una amistad entre dos hombres heterosexuales. La interpretación de Brendan Gleeson como Colm, quien propone una desgarradora ruptura a Padraic, interpretado por Colin Farrell, impulsa su vínculo inquebrantable hacia un estado irremediable.

Los espectadores tienen la libertad de interpretar la película como una metáfora del corte de lazos entre dos personas. Romper tales conexiones es difícil, en especial cuando las personas dejan huellas indelebles en las vidas del otro debido a la proximidad geográfica o la implicación emocional.

Sin embargo, el alcance narrativo de Los espíritus de la isla va mucho más allá de esta comprensión. Numerosos detalles sirven como recordatorios de las profundas intenciones de Martin McDonagh. La gran historia de Irlanda se menciona brevemente en el guion. Se siente como una nube ominosa a lo largo de la historia, que arroja sombras que envuelven el escenario.

Dos elementos críticos del contexto histórico se destacan: los lejanos sonidos de disparos desde fuera de la isla, que los personajes señalan como los sonidos de la Guerra Civil Irlandesa. El otro es el calendario en la casa de Padraic, que nos muestra que es abril del año 1923. Este es el último mes de la Guerra Civil Irlandesa, que marca el tiempo y el contexto histórico de la historia.

Si la película girara en torno a la amistad, podría haberse desarrollado en cualquier momento y espacio, lo que haría que estos indicadores históricos fueran irrelevantes. El exceso de simbolismo no es bueno para un dramaturgo de dramas absurdos.

Colm y Padraic, que simbolizan las facciones en conflicto, representan rasgos distintos. A Colm le encanta tocar música y escribir canciones, es culto y se relaciona con estudiantes internacionales. Su hogar está lleno de ornamentos de todo el Reino Unido. Colm representa a la élite irlandesa y el sentimiento pro-británico. En contraste, Padraic muestra rasgos más locales. Es sencillo y amable, vive con su hermana. Tiene un burro y algunas vacas y mantiene su sustento a través de la cría de ganado lechero. Padraic es el símbolo de la clase trabajadora durante la Guerra Civil Irlandesa.

El choque de ideologías entre Colm y Padraic ocurre principalmente en una escena de bar. Padraic acusa a Colm de perder su bondad, lo que desencadena un acalorado debate sobre el significado de la bondad. Padraic argumenta: "Ya no eres amable. Mi papá, mamá, hermana, todos son amables. Los recordaré". Colm sostiene que la bondad no puede hacer que nadie los recuerde, pero la música y la poesía pueden perdurar en el tiempo. Padraic replica: "Aún así, él habla como si fuera inglés".

Este diálogo sirve como un momento de conflicto ideológico, que aclara la narrativa más profunda de la ruptura de esta amistad como un microcosmos de la Guerra Civil Irlandesa. La sabiduría del creador brilla mientras explora los vínculos entre el patriarcado y la guerra, al usar un vínculo entre hombres para alegorizar la progresión de la guerra, una elección brillante.

Los dramaturgos experimentados evitan etiquetar a los personajes o emitir juicios. Muchos espectadores pueden identificarse con Colm, al hallar difícil romper los lazos con alguien que no les gusta. Sin embargo, el dramaturgo no favorece de manera inequívoca a Colm. Colm se aferra a conceptos abstractos pero no puede ser amable con una persona en particular. Por otro lado, Padraic necesita ser más obstinado y capaz de comprender ideas más grandes.

El orgullo de ambos hombres obstaculiza su capacidad para dejar de lado sus egos y dignidad, lo que hace que sea difícil discernir quién tiene razón o quién está equivocado. Los espectadores simpatizan con Padraic pero siguen desconcertados por su obsesión, mientras admiran la determinación de Colm, pero cuestionan sus acciones. Así se produce un conflicto inevitable y más intenso.

Sin embargo, la isla alberga una culpa continua, con las víctimas reales que pasan desapercibidas. Dominic, quien sufre violencia por parte de su padre, se convierte en una víctima. Después de la confesión de Dominic, la hermana de Padraic abandona la isla. Estos dos personajes simbolizan el destino de los débiles y la partida de los sabios. La mujer mayor lo observa todo como una profetisa irlandesa que presencia los acontecimientos.

Los personajes secundarios enriquecen la profundidad de la película y aparecen como sus elementos más trágicos. Joseph Brodsky dijo una vez: "En una verdadera tragedia, no es el héroe quien perece, es el coro".

Influenciado por el folclore irlandés y las tradiciones teatrales, Martin McDonagh sobresale en la entrega de narrativas profundas a través de detalles sutiles y impactantes. Se abstiene de abrumar la narrativa con símbolos y trata de usar una narrativa minimalista y técnicas que infunden a la historia un poder único de absurdo. La película golpea a la audiencia e ilumina la historia.

Martin McDonagh no escribió esta historia por capricho. Debe haber sentido la situación actual y percibió que esta historia era necesaria. Establecer una comunicación significativa es difícil en un mundo fragmentado y plagado de conflictos. Mientras veía la película, me sumergí por completo en la historia. Los espíritus de la isla resonó perfectamente en mi interior.

Esta isla de Inisherin refleja la isla irlandesa y es un símbolo de cualquier región en el mundo que se ve envuelta en conflictos similares. Encarna la conexión entre tú, yo y la tierra bajo nuestros pies.