Crítica a "Beetlejuice" (1988) de Tim Burton. ¿Se viene la 2?

Introducción

Beetlejuice es una película de 1988 de Tim Burton y cuenta con las actuaciones de Alec Baldwin, Winona Ryder y Michael Keaton. Cierta parte de la crítica de ese entonces, ha valorado la naturaleza excéntrica de los personajes y de las situaciones que aparecen, mientras que otros señalaron que dichos excesos estrangulan la historia y a los personajes. Por tanto, la crítica al joven cineasta de aquel entonces estuvo dividida.

¿De qué trata el filme?

Beetlejuice cuenta la historia de una pareja Adam Maitland (Alec Baldwin) y su esposa Bárbara Maitland (Geena Davis), que tras un accidente con su auto, mueren. Al poco tiempo después de estrenar su nueva casa. Debido a ello, la casa es puesta en venta y los nuevos propietarios de la casa son una familia de modernos neoyorkinos: el señor Charles Deetz (Jeffrey Jones), un inteligente y exitoso empresario, su joven mujer Delia Deetz (Catherine O'Hara), una hermosa y extravagante escultora (pero, a decir verdad una fracasada escultora), y la única hija de Charles, Lydia Deetz (Winona Ryder). Lydia es una sombría adolescente gótica y que detesta la vida.

Lo que la familia “intrusa” Deetz no imagina es que Adam y Bárbara, convertidos ya en fantasmas y que han quedado en su casa, están molestos con su llegada y desean deshacerse de ellos; luego de tantos intentos fallidos, por accidente y sin desearlo verdaderamente, Adam y Bárbara le piden ayuda a Beetlejuice (Michael Keaton), un poco depravado, desagradable y aprovechado, para que utilice sus “métodos” para echar a los Deetz de la casa.

La personalidad de Lydia Deetz

Winona Ryder ha hecho de Lydia Deetz un personaje muy singular. Como decíamos ut supra Lydia detesta la vida y a su madrastra Delia. Eso puede observarse en el filme. Lydia a diferencia de los demás vivos puede ver a los muertos, a los fantasmas de Adam y Bárbara, ya que como ha leído en el libro de los “recién fallecidos”, los vivos sólo ven lo común o lo usual, mientras que ella es capaz de ver “más allá”. En este contexto surge la pregunta de cómo la angustia o la predisposición hacia ella es también presentada como forma de pensarse a sí mismo y a su propia existencia. El camino del saber, muchas veces angustia. Entrometerse en temas ligados a la muerte, a la enfermedad… pueden traer consigo huellas que hace al que se obsesiona en estos temas signos de tristeza como sucede en el caso del personaje interpretado por Winona Ryder.

Sin duda, el director Tim Burton y su visión pesimista del mundo puede tener cierto rasgo de representación con su personaje de Lydia. El atormentado Tim Burton crea un personaje con ideaciones suicidas y con un desprecio inminente por la vida y por aquellos que viven superficialmente en un mundo en el que acontecen relaciones no tan amistosas. El padre de Lydia y su madrastra no tienen mucho cariño para dar y eso se ve reflejado en el filme. Ese no-saber-entender a Lydia está presente.

Sin embargo, los fantasmas de Adam y Barbara que en su vida terrenal no podían tener hijos y eso era motivo de angustia acogen felizmente a Lydia o como le dice Beetlejuice: “la sobrina de Edgar Allan Poe”.

Beetlejuice, un ser depravado

Un desconocido Michael Keaton que luego será el batman de Tim Burton, presenta a emblemático fantasma. Beetlejuice hace tiempo que no ve una sola mujer, hace tiempo que no sale de su tumba. Lo primero que hace al salir es besar delante de Adam a su esposa Barbara. Se construyó un personaje bastante excéntrico. Podríamos decir Beetlejuice sufre de cierta locura y está más que claro que sus métodos son poco ortodoxos, es decir, se divierte asustando y haciendo sufrir a la hora de asustar a los vivos.

También busca la manera de casarse con Lydia. Es un personaje que sin dudas ha quedado para la historia. Keaton se vale del aparato gestual de un psicópata para crear a este personaje. Los efectos visuales muestran a un Beetlejuice muy bizarro, pero sin duda este personaje no pierde en ningún momento la gracia.

Comentarios finales

Todo indica que en el 2024 tendremos a más de 30 años de su estreno el regreso de una segunda parte de Beetlejuice con la participación ni más ni menos que de Jenna Ortega.

Lo cual hace que nosotros, los grandes amantes del cine de Tim Burton, nos alegremos. Y, más aún con la incorporación de la Ortega, que seguramente tendremos que avisarle de no pronunciar: Beetlejuice, Beetlejuice, Beetlejuice…