Ahsoka: La fuerza ha perdido el equilibrio una vez más

La serie live-action protagonizada por Ahsoka, uno de los personajes más queridos de la serie animada de Star Wars, se estrenó en agosto. El primer episodio fue visto en 1,2 millones de hogares, lo que es comparable a la audiencia de Andor, pero inferior a la de Obi-Wan Kenobi.

Después de haber visto los primeros episodios, como fan de Star Wars, siento que la serie no le resultará interesante a los fans de Andor ni tampoco atraerá a nuevas seguidores de la franquicia de The Mandalorian. Para decirlo de una forma más clara, la serie cae en una posición intermedia un poco extraña, ya que los fanáticos de Star Wars encuentran que carece de novedad, mientras que aquellos que no están familiarizados con la serie pueden tener dificultades para comprender las relaciones entre los personajes.

A Dave Filoni, el productor ejecutivo, se le atribuye el éxito del personaje en series animadas como The Clone Wars y Rebels. Él es el creador de Ahsoka, el primer personaje que presentó al unirse con Lucasfilm. En la serie animada, Ahsoka pasa de ser la padawan de Anakin Skywalker a una guerrera que rompe con la Orden Jedi, ganándose el reconocimiento de los fanáticos de Star Wars. Es por eso que la aparición de Rosario Dawson como la live-action Ahsoka en la segunda temporada de The Mandalorian, también producida por Filoni, fue un carnaval para los fanáticos. Es por eso que a finales de 2020, Ahsoka se programó oficialmente como una serie derivada. Después de todo, ¿quién no querría ver una serie live-action con una Jedi como personaje principal?

Antes de su estreno, Lucasfilm había anunciado que estaba ambientada en la misma época que The Mandalorian. Y más allá de eso, como ya descubrieron los fanáticos de Star Wars después de su lanzamiento, la serie continúa las historias de Rebels. Filoni, figura clave en la producción de ambos, encontró interesante esta continuidad. Explicó que no quería limitar la forma de contar historias y que no veía la necesidad de que la serie animada y el live-action se contaran de maneras completamente diferentes. "Es sólo la historia que es, y la estaba contando en un sólo medio"

La continuidad, que parece natural para los productores, puede llevar a experiencias de visualización divergentes en diferentes públicos. Los recién llegados a la franquicia tienen que lidiar con personajes y relaciones ya establecidas, en lugar de conocerlos gradualmente mientras viven una aventura con ellos. Sin embargo, los fanáticos leales que ya han visto la serie animada pueden encontrar que el mayor problema con Ahsoka es la falta de contenido nuevo.

La serie sigue a Ahsoka mientras investiga el paradero del villano Gran Almirante Thrawn (Lars Mikkelsen) después de la caída del Imperio Galáctico. Ahsoka obtiene un mapa que puede indicar la ubicación de Thrawn y busca la ayuda de la general Hera Syndulla (Mary Elizabeth Winstead), con quien luchó en el pasado. Syndulla sugiere que Ahsoka busque la ayuda de Sabine Wren (Natasha Liu Bordizzo), ex aprendiz de Ahsoka, para desbloquear el mapa. Mientras tanto, Baylan Skoll (Ray Stevenson) y Shin Hati (Ivanna Sakhno) también están buscando a Thrawn. La batalla entre las dos parejas Jedi es sin duda una de las partes más espléndidas de la historia.

Las dos historias paralelas, la búsqueda de Thrawn y el resurgimiento de la relación de Ahsoka y Sabine, pretenden tener el mismo peso. Sin embargo, esto último no es claro para el público nuevo de Star Wars, ya que se trasmite sólo a través de diálogos y no a partir de situaciones y desarrollos argumentales, lo cual genera más dudas que respuestas a medida que la serie avanza. Como fanático de Star Wars, simplemente me preguntaba cuánto tiempo pasaría hasta que aparecieran Thrawn y el rumoreado aprendiz Jedi sobreviviente, Ezra Bridger.

Con todo esto, no intento decir que Ahsoka no tenga aspectos positivos. La interpretación de Dawson es particularmente notable. Ahsoka toma la difícil decisión de abandonar la Orden Jedi y es testigo de primera mano de los efectos devastadores de las Guerras Clon, lo que incluye la caída de su antiguo maestro Anakin al lado oscuro. Con el tiempo, Ahsoka madura y pasa de ser una guerrera impulsiva a una usuaria de la Fuerza confiable, serena y poderosa. En una escena, le aconseja a Sabine que se concentre en ser ella misma en lugar de obsesionarse con convertirse en Jedi, mostrando su sabiduría y tolerancia. Sería emocionante ver cómo Ahsoka entrena a Sabine, pero hasta ahora, su relación no se ha desarrollado y se limita a diálogos sin sentido.

En el primer episodio dirigido por Filoni, Sabine y Heti se involucran en un esperado duelo con sables de luz, que refleja los esfuerzos por diversificar el universo de Star Wars. En el pasado, las mujeres portadoras de sables de luz solo aparecían como personajes de fondo en las trilogías originales. Todo cambió cuando Rey se convirtió en la protagonista de la trilogía secuela. Sin embargo, el entusiasmo y la admiración por la diversidad duró poco. Cuando Sabine fue apuñalada con un sable de luz en el primer episodio, parecía que iba a morir, pero su herida sanó rápidamente. Este escenario refleja un incidente similar en Obi-Wan Kenobi, que decepcionó a muchos fanáticos de Star Wars: el Maestro Jedi Qui-Gon Jinn murió a causa de un puntazo con un sable de luz en La amenaza fantasma. Aunque hay una brecha de tiempo entre los eventos de La amenaza fantasma y las historias de Obi-Wan Kenobi y Ahsoka, esto aún confunde a los seguidores cuando los resultados del mismo tipo de sufrimiento difieren.

La confusión surge de la lucha de Lucasfilm por expandir el universo de Star Wars sin dejar de mantenerse fiel a sus orígenes. Andor y The Mandalorian consiguieron lograr el equilibrio preservando la esencia de la ópera espacial y la firme creencia de que el héroe superará la oscuridad, a través del retrato de la valentía de Andor contra las fuerzas del mal o el viaje del vaquero espacial Din Djarin con Grogu. Sin embargo, Obi-Wan Kenobi, que está más cerca de la historia principal de Star Wars, no logró impresionar, a pesar de presentar a Darth Vader y su duelo con Obi-Wan. La trama mediocre del programa y el desarrollo de personajes sin mucha inspiración dañaron su reputación. En mi opinión, Ahsoka enfrenta ahora desafíos similares.

Aunque Ahsoka es un personaje querido en el universo de Star Wars, el lento ritmo narrativo y las relaciones poco desarrolladas entre los personajes me preocupan. Ya es hora de presentar a un villano importante en lugar de presentar una batalla aérea aburrida en un episodio completo, ya que la serie ha avanzado hasta la mitad. Star Wars me encanta y es por eso que seguiré viendo Ahsoka, pero todo esto me hace reflexionar acerca de cuánto puede durar la tendencia de las series de live-action si se basan únicamente en el carisma de los personajes principales sin correr riesgos ni introducir nuevas ideas en la historia principal.