Pocos actores tienen tantos personajes épicos en su carrera como Keanu Reeves, quien se posiciona como un actor icónico para dos generaciones diferentes. Hasta hace unas semanas, Keanu solo significaba Matrix para mí, pero ahora es uno de mis asesinos favoritos en el cine. Desde la primera entrega de John Wick, no pude parar. Pensé que solo sería una película más de acción, pero la verdad es que es una historia destacable y, a diferencia de otras franquicias, esta solo mejora con cada entrega.
Si hacemos un recorrido corto por las películas anteriores, nos damos cuenta de cómo van profundizando en la historia desde que nos presentan a John con sus conflictos y su fama dentro del mundo de los asesinos en la primera entrega, hasta la segunda entrega en la que nos adentramos más en la trama de John y todo lo que conlleva su poco respeto por las leyes de los asesinos. En la tercera entrega, la trama se enfoca aún más en John y su conflicto con el mundo de los asesinos, así como con la organización secreta "La mesa".
En esta última entrega, John Wick llega a un nuevo nivel en su trama. Un nuevo villano, más atemorizante, se enfrenta a John con todas las fuerzas de "La mesa". Aunque algunas secuencias de pelea se extienden demasiado, nos dan una nueva perspectiva de las escenas de acción. La historia es sencilla y se atiene a lo que ya hemos visto en la saga, pero sus escenas bien construidas sorprenden con un nuevo amanecer para John. Hay una esperanza para salir del mundo del asesinato, pero deberá acabar con todos sus enemigos antes de lograr su redención.
En mi opinión, esta entrega tiene mucha emoción y supera con creces la premisa sencilla con la que comenzó todo en la primera entrega. Pero, como todo lo bueno, debe acabar. John Wick 4 debería ser la última entrega de esta saga que dejaría muy bien posicionada a toda esta historia, sin caer en querer sobrevivir sin nada que contar. En mi opinión, cada entrega muestra más del mundo de John, pero también se siente la necesidad improvisada de mostrar personajes convenientes que solo sirven para que la trama sea más fantasiosa y no hacen un aporte real. Cada vez parece que John pierde sus motivos y se convierte cada vez más en un personaje sin sentido más que entretener con asesinatos infinitos.
John Wick 4 es una película que no puedes dejar de ver porque, en definitiva, es un clásico del cine de acción. Aunque tiene sus fallos, cuando la ves por primera vez, vale la pena las casi 3 horas de duración que tiene. Es una experiencia de cine que te dejará con la boca abierta, pero honestamente, no me dejó esperando una quinta entrega.
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