El "Brainwashing" en el cine: Cinco películas para entender el término

En el año 1950, el periodista estadounidense Edward Hunter fue el primero en introducir el término: “Las tácticas de lavado de cerebro obligan a los chinos a formar filas del Partido Comunista”, decía el titular del diario Miami Daily News en septiembre de 1950.

Claro está, el proceso en si del ‘brainwashing’ es mucho más antiguo. Existe desde siempre. Bueno, no tanto, pero seguramente desde hace mucho más que cien años.

La definición del término es un traducción del xi-nao: ‘xi’ ➝ lavado, y ‘nao’ ➝ cerebro.

La cuestión es que Hunter pudo dar fe en el artículo, y luego en un libro que publicaría, de cómo el Ejército Rojo de Mao Zedong utilizó técnicas antiguas para convertir al pueblo chino en autómatas comunistas. Llamó a este proceso hipnótico “brainwashing”. Estaba destinado a "cambiar radicalmente una mente para que su dueño se convierta en un títere viviente, un robot humano, sin que la atrocidad sea visible desde el exterior".

Entonces, ¿de qué manera el cine nos muestra esto? Hay muchas películas que lo hicieron, pero estos cinco ejemplos nos muestran diferentes facetas del brainwashing para que entendamos lo que es:

1. THE MASTER ('The Master', 2012) dirigida por Paul Thomas Anderson

La sexta película de Paul Thomas Anderson narra la historia de Freddie Quell, un atormentado y problemático veterano de la Marina en los años 50 que por arte del destino se topa con Lancaster Dodd, un hombre que es el lider de una organización llamada La Causa, donde mediante diferentes métodos tratan de sanar a las personas.

The Master es una película nos habla sobre la manipulación mediante el discurso, Lancaster (interpretado por el impresionante Philip Seymour Hoffman) es un ser humano muy carismático y con un poder de persuasión atrapante, pero la figura de Freddie es la que le muestra la faceta más dolida y sensible del ser humano, uno traumatizado por la guerra y probablemente, sin escape ni “cura”. Y es ahí donde Lancaster se “entrega” a la imprevisibilidad de Freddie, desbaratando todo ese plan perfecto que tiene para hacer crecer a su comunidad.

2. A CLOCKWORK ORANGE ('La Naranja Mecánica', 1971) dirigida por Stanley Kubrick

Uno de los ejemplos más gráficos y notorios del brainwashing (y también más controversiales) es el del genio de Stanley Kubrick: un director que mediante la provocación creó una de las filmografías más impresionantes de todos los tiempos.

En este caso A Clockwork Orange nos cuenta la historia de Alex, un sádico joven que pertenece a un grupo de maleantes que rondan las calles de una distópica Britania. No pasa mucho tiempo hasta que son arrestados y es Alex, el más problemático de todos, el que recibe un tratamiento para tratar su llamada “ultraviolencia”. Kubrick hace un giro genial, y nos muestra la violencia vista ya no desde la perspectiva de un joven que la ejerce, sino desde un sistema que intenta reformarlo mediante extremos métodos. Alex sale a la calle como otra persona. Pero, ¿realmente lo es?

3. ROSEMARY'S BABY ('El Bebé de Rosemary', 1968) dirigida por Roman Polanski

En la década de los 60s el nombre de Roman Polanksi era uno conocido por todo el mundo. Probablemente el director más solicitado de esa época, fue a finales de los 60s donde con Rosemary's Baby, que llegó a un nivel de maestría inigualable.

La película narra la historia de Rosemary, una joven futura madre que se muda junto a su pareja a un barrio bastante deteriorado cerca de Central Park, y allí comienza a tener pesadillas y pensamientos bastante oscuros y extraños. Sus vecinos parecen ser inquietantemente amables, y Guy, su esposo, comienza a actuar raro.

Secundariamente, pero no sin perder importancia, Rosemary's Baby es una cinta sobre el brainwashing con los códigos del género de terror. Nos habla sobre el lavaje de cerebro mediante el simbolismo, mediante la influencia de la sabiduría (la vejez), los trastornos que pueden traer un embarazo ¿no deseado? Un conjunto de factores que pueden hacer que alguien de manera (casi) voluntaria tome decisiones drásticas en su vida.

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4. THE TRUMAN SHOW ('The Truman Show', 1998) dirigida por Peter Weir.

El ejemplo más moderno de este listado es el del clásico The Truman Show, una película que logró sobrevivir a la época en la que se estrenó, y no solo eso, sino que a día de hoy es de una importancia y relevancia quizá mayor a lo que fue en su momento.

La historia es acerca de la vida de Truman, un adulto que pasó toda su vida viviendo una mentira. Nació como un proyecto de reality para TV, donde su vida sería la primera televisada a todo el mundo desde el nacimiento de una persona, hasta que muere. Las causas que esto traen en Truman pueden ser irreparables, pero la película nos muestra el poder de voluntad que tenemos para atravesar las situaciones más difíciles. Este proceso de brainwashing en la película no está aplicado a Truman, que es alguien que vive su vida normalmente, sino a la gente que consume su vida y la que es parte de ella. Interesante, ¿no?

5. A WOMAN UNDER THE INFLUENCE ('Una Mujer Bajo La Influencia', 1974) dirigida por John Cassavetes

El último (y quizás menos conocido) de los ejemplos en este listado es la obra maestra de John Cassavates A Woman Under The Influence, un estudio de personaje que nos cuenta la historia de Mabel, una mentalmente inestable mujer que lidia con la crianza de sus tres hijos, y con la relación que tiene con su (también mentalmente inestable) marido. Es un excelente ejemplo no del proceso del brainwashing per se, sino de una persona en una crisis nerviosa tal que está convencida de que todos los que quieran ayudarla están lavándole el cerebro.

Es importante ver este término desde todas las aristas para comprender no solo lo que es, sino también como se aborda y desde qué punto de vista.

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